jueves, 19 de junio de 2008

-Eres tú quien esperaba el toque de la séptima trompeta, ¿verdad? Escucha ahora lo que dice la voz: "Sella las cosas que han dicho los siete truenos y no las escribas, toma y cómelo, y amargará tu vientre, pero en tu boca será dulce como la miel."
¿Ves? ahora sello lo que no debía ser dicho, y lo sello convirtiéndome en su tumba.
Y se echó a reír, justo él. Era la primera vez que lo oía reír... Reír con la garganta, sin que sus labios expresaran alegría, pues daba casi la impresión de estar llorando:
-No te esperabas este final, ¿verdad Guillermo? Por gracia del Señor, este viejo gana otra vez, ¿verdad?
Y como Guillermo intentó quitarle el libro, Jorge, que advirtió el gesto por la vibración del aire, se echó hacia atrás apretando el libro contra su pecho con la mano izquierda, mientras que con la derecha seguía desgarrando sus páginas y metiéndoselas en la boca.
[...]
"¡Rápido, rápido!" Finalmente encendí la lámpara.
-¡Rápido - volvió a incitarme Guillermo-, si no se comerá todo el Aristóteles!
-¡ Y morirá! - grité angustiado mientras corría a su encuentro y juntos nos poníamos a buscar.
-¡No me importa que muera el maldito! -gritaba Guillermo clavando los ojos en la oscuridad que nos rodeaba y moviéndose de un lado para otro-. Total, con lo que ha comido su suerte ya está sellada. ¡Pero yo quiero el libro!

El Nombre de la Rosa,
U. Eco

2 comentarios:

Lord Enzi dijo...

¡Magnífica entrada, Mira!
Pobre de aquel que no disfrutó de "El nombre de la rosa" en su día. Lo tiene todo: está bien escrito, es emocionante, erudito... un gozo si se lee en el momento adecuado.
El fragmento que has elegido es, además, y no será por casualidad, uno de los momentos álgidos de la novela, con Jorge comiéndose el nunca encontrado libro sobre la comedia de Aristóteles, donde, en contrapeso de la "Poética", se supone, defendía las posibilidades menos dramáticas de la Literatura.
Aprovecho para recomendaros la "Poética", pilar de la forma occidental de escribir en general y de concebir el teatro en particular (también uno de los pocos textos de Aristóteles soportables, dicho sea de paso).
Ya puestos, leed también al Eco ensayista, por ejemplo su "Sobre literatura". Con semejantes título y autor, no hace falta justificar su compra.

Superfucker dijo...

No leí el libro, sacrílego yo, pero si que vi la peli...recuerdo que el motivo de disputa intelectual es si el conocimiento y el sentido del humor deben ser repudiados por que alejan al hombre de Dios...lo que me da por el culo es constatar cada dia cómo cuando vemos estas conductas en nuestra Iglesia nos indignamos por su oscurantismo, pero cuando se trata de la literatura oriental y su misticismo (el cual, no lo olvidemos,desprecia con una sonrisa condescendiente todo intento de erudición o de ilustración y pedagogía),entonces nosotros, mamarrachos de la Nueva Era que certifica nuestra decadencia, nos maravillamos como babosos de su profundidad...