martes, 5 de octubre de 2010

El futuro de la ciencia según Feynman

"¿Cuál es el futuro de esta aventura? ¿Qué ocurrirá en última instancia? Es seguro que vamos a continuar descubriendo leyes. ¿Cuántas leyes habrá que descubrir? No lo sé. Algunos colegas dicen que este aspecto fundamental de nuestra ciencia continuará, pero yo estoy convencido de que no surgirán novedades de manera perpetua, digamos durante mil años. No puede ser que esto siga así y vayamos descubriendo cada vez más leyes nuevas. De ser así, acabará resultando aburrido descubrir que hay tantos niveles uno debajo del otro. A mí me parece que lo que va a ocurrir en el futuro es que o bien acabaremos conociendo todas la leyes (es decir, que tendremos suficientes leyes para que las consecuencias calculadas concuerden siempre con los experimentos, lo que será el fin) o bien los experimentos se irán haciendo cada vez más difíciles y caros, de manera que comprenderemos el 99,9% de los fenómenos, pero siempre surgirá algo que será muy difícil de medir y no concordará con lo anterior, y tan pronto se obtenga la explicación de este hecho surgirá otro más, y el proceso irá haciéndose cada vez más lento y menos interesante. Ésta es otra manera de acabar. Pero, en cualquier caso, pienso que se acabará de una manera u otra."
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Richard Feynman, "El carácter de la ley física".

4 comentarios:

Lord Enzi dijo...

Una de cada una doctoras en ciencias consultadas está de acuerdo con lo que dice mi admirado Feynman.

SirSer dijo...

Muy razonable. La pregunta es: ¿qué porcentaje de fenómenos conocemos ya?

Joan dijo...

Es curioso cómo se confunden los niveles entre ciencia y conocimiento, como si todo conocimiento hubiera de ser científico ... Probablemente, la resolución de todas las leyes del universo mediante el conocimiento científico dejaría sin respuesta un buen montón de preguntas, que simplemente quedan más allá del método científico por una cuestión puramente estructural o metodológica. La filosofía analítica respondería que simplemente nos debemos contentar con el hecho de que estas preguntas están mal formuladas. Pero podemos preguntarnos: ¿mal formuladas según qué vara de medir? Y la respuesta es: según el método científico, con lo que redundamos en circularidad. Si la respuesta es: "mal formuladas según el uso lógico del lenguaje", aún peor; pues, ¿qué es la aventura del conocimiento (al menos el filosófico) si no es la impostura de arremeter constantemente con los límites del lenguaje, sin a la vez condenarnos al silencio? ¿Qué es la filosofía sino intentar decir lo que no se puede decir? Frente a esta impostura, tanto la ciencia como la mística se sienten siempre incómodas. El científico niega que la pregunta que plantea los límites del lenguaje tenga sentido alguno; por tanto, intenta mostrar su inutilidad. El místico nos hace callar, porque aún reconociendo que lo preguntado es legítimo, su planteamiento nunca puede proceder de manera lingüística, y depende de no sé qué experiencia. Pero es obligación del filósofo seguir arremetiendo con los límites del lenguaje. Esa actitud de golpear una y otra vez los límites del lenguaje, pero CON el lenguaje, seguirá incólume por mucho que el conocimiento científico se vaya acumulando o aproximando a su hipotético "final".

Lord Enzi dijo...

Profesor, estoy de acuerdo con lo que dices, que, por otra parte, no veo que se contradiga con el texto de Feynman. Él plantea que el conocimiento científico tiene un final (y, respondiendo a Bartlobio, probablemente no muy lejano, en el sentido de la inversión necesaria para conocer un poquito más, véase CERN y similares). Es más, se limita a hablar desde y para la ciencia, sin cuestionar otro tipo de conocimiento. En definitiva, plantea que la ciencia tiene unas posibilidades muy finitas... lo que ¿no lo pone de "tu" lado?