domingo, 7 de diciembre de 2008

La canción del pirata, de Espronceda

Con diez cañones por banda,
viento en popa, a toda vela,
no corta el mar, sino vuela
un velero bergantín.
Bajel pirata que llaman,
por su bravura, El Temido,
en todo mar conocido
del uno al otro confín.

La luna en el mar riela
en la lona gime el viento,
y alza en blando movimiento
olas de plata y azul;
y va el capitán pirata,
cantando alegre en la popa,
Asia a un lado, al otro Europa,
y allá a su frente Istambul:

Navega, velero mío
sin temor,
que ni enemigo navío
ni tormenta, ni bonanza
tu rumbo a torcer alcanza,
ni a sujetar tu valor.

Veinte presas
hemos hecho
a despecho
del inglés
y han rendido
sus pendones
cien naciones
a mis pies.

Que es mi barco mi tesoro,
que es mi dios la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria, la mar.

Allá; muevan feroz guerra
ciegos reyes
por un palmo más de tierra;
que yo aquí; tengo por mío
cuanto abarca el mar bravío,
a quien nadie impuso leyes.

Y no hay playa,
sea cualquiera,
ni bandera
de esplendor,
que no sienta
mi derecho
y dé pechos
mi valor.

Que es mi barco mi tesoro,
que es mi dios la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria, la mar.

A la voz de "¡barco viene!"
es de ver
cómo vira y se previene
a todo trapo a escapar;
que yo soy el rey del mar,
y mi furia es de temer.

En las presas
yo divido
lo cogido
por igual;
sólo quiero
por riqueza
la belleza
sin rival.

Que es mi barco mi tesoro,
que es mi dios la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria, la mar.

¡Sentenciado estoy a muerte!
Yo me río
no me abandone la suerte,
y al mismo que me condena,
colgaré de alguna antena,
quizá; en su propio navío

Y si caigo,
¿qué es la vida?
Por perdida
ya la di,
cuando el yugo
del esclavo,
como un bravo,
sacudí.

Que es mi barco mi tesoro,
que es mi dios la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria, la mar.

Son mi música mejor
aquilones,
el estrépito y temblor
de los cables sacudidos,
del negro mar los bramidos
y el rugir de mis cañones.

Y del trueno
al son violento,
y del viento
al rebramar,
yo me duermo
sosegado,
arrullado
por el mar.

Que es mi barco mi tesoro,
que es mi dios la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria, la mar.

José de Espronceda (1.808-1.842)

6 comentarios:

Lord Enzi dijo...

Hará como veinte años que la leí por primera vez, en "Senda" o algún otro de aquellos libros de lectura (de Santillana, creo), y me sigue pareciendo igual de potente. ¿Alguien sabe si hoy aún se enseña en los colegios?

¡Vaya comentario éste! ¿Nos estaremos haciendo mayores?

Joan dijo...

Sé que Becquer se lee todavía. El año pasado creo que era lectura de curso. Este año leen a Unamuno; creo que "Amor y pedagogía".

Mira dijo...

Lo leiste en el senda ??? ese libro no era de segundo de egb ??? no eramos mu pequeños pa eso ??? si tengo un ratito lo busco a ver que era lo que leiamos entonces que ara me ha picat el gusanillo...

Mira dijo...

bueno, yo lo hice servir hasta tercero, pero parece que había hasta mas allá... axins que si que es podible que fuese del senda... que tiempos aquellos... si que nos hacemos mayores...
Que bueno por cierto el trozo ese del 'y si caigo'... me has hecho recordar esos dias en los que memorizaba este poemilla para soltarlo en navidad y cobrar el aguinaldo... ara no soy capaz de pasar de la luna en el mar riela... que triste !!!

comunllum dijo...

Creo que cuando lo enseñaban era algo más alla de tercero de EGB, en un Senda o similar, eso si. Tuve que memorizarlo igual que Mira, y con el paso de los años también me quedo en la luna el mar riela.

Superfucker dijo...

El poema será bueno, pero cuenta con toda mi antipatía por haber sido obligado a aprendérmelo de memoria. Por otro lado, los románticos españoles siempre me han parecido unos julandrones de mucho cuidado...